Antes de conseguir una coche, no me gustaba cuando mis abuelos necesitaban llevarme a la escuela, me daba vergüenza. También, tenía una hora para regresar a la casa, y fue más temprano de mis amigos. Todas las noches, tenía tarea. No me gustaba cuando necesitaba hacer mi maleta(valija) para cambiar de casa cada semana.
Las cosas buenas de adolescencia:
Me gustaban mucho los partidos de volibol en secundaria. Mis maestros eran amables y yo aprendí mucho de ellos. Yo iba en excursiones a esquiar y otros actividades con mis compañeros de iglesia. Todos los días eran tranquilos y no tuve muchas responsabilidades.
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